Buenos días,
Esta entrada que quería hacer esta semana es acerca de unas situaciones graves que se están produciendo en este ámbito de la protección de menores y que van en aumento.
Junto a la tardía detección de situación de desprotección grave o incluso, cuando sí se detectan a tiempo pero como se intenta que el menor no se separe de su familia, se alarga el proceso cada vez más y esto, a su vez, repercute negativamente en él. Durante todo este tiempo, el menor durante años ha estado viviendo situaciones muy complicadas y críticas. A esto se suma que muchos de ellos además de sus problemas conductuales como fruto de esta situación, consumen drogas desde muy temprano, no van al colegio regularmente, hacen lo que quieren... Pues en ese instante cuando se decide que vaya a un centro de protección de menores donde hay unas normas, donde se le va a exigir una asistencia regular a clase, entre otras cosas, solo eso a estos chicos les supone muchísimo, se agobian y descargan toda su agresividad interna con las instalaciones y a veces, incluso con el personal ya sea de forma verbal o incluso física. A pesar de ir al psicólogo, esto no es suficiente, porque dan citas mensuales. Se les da una buena cobertura afectiva desde el centro, se le intenta ayudar en todo lo que sea posible pero esto no es suficiente. Ellos siguen luchando contra todas las reglas, las normas, sufren por la separación familiar, tienen problemas de abstinencia, no quieren ir al colegio, se sienten controlados... El Gobierno de Extremadura debería facilitar más recursos especializados ante este tipo de problemáticas y proporcionarlos con mayor rapidez y fluidez.
Un saludo
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